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Recuerdo viaje a Valdivia

18 Aug

Una foto artística de aquel bizarro viaje que hicimos con Fakuta & The Laura Palmers a Valdivia el año pasado. De izquierda a derecha: Ariel Altamirano (DJ De Mentira), Denise Elphick, Anita Gallardo, un perro y yo. Foto tomada por la Fakuta.

Parte buena del viaje

6 Dec

Muchas gracias a todos los que leyeron lo que escribí. La idea no era decir que todos los valdivianos son así, sino solo esa gente puntual que nos faltó el respeto y se barseó. El resto de la gente en Valdivia fue realmente amorosa, nos trataron muy bien en todas las partes donde fuimos! De hecho, y hablo por mi al menos, me encantaría volver pronto para allá.
Era obvio que iban a aparecer comentarios riéndose también. Una persona super valiente escribió el siguiente anónimo:

rockstar Enviado el 07/12/2011 a las 9:49 am
juaujaujaujaujujaauja ROCK AND ROLL!!!!! chicas, vayan al colegio donde pueden acusar a sus compañeros.

No considero que informar una situación en la que nos faltaron el respeto tanto unos “””colegas””” como la gente que nos llevó para allá sea una pataleta de cabras chicas. Aquí no estoy ACUSANDO a nadie, estoy INFORMANDO lo que pasó y considero que el relato puede servirle a alguien a evitarse malos ratos.
La verdad no me interesa entrar en polémicas, la idea era solo contar lo que pasó.
Al final me quedo con lo bonito del paisaje, el cariño de toda la gente con quien conversé, la comida deliciosa y la compañía bacán.

Bueno, dejo entonces una pequeña selección de fotos de la parte buena del viaje.

Recién llegados a la hostal, cuando no sabíamos lo que nos esperaba.

El famoso crudo del Haussman

Llegando a la isla Mancera, locación perfecta para el videoclip de Virreinatos (F&LP)

Fuerte de Niebla

Kunstmann

Degustación de cervezas!

Nuestro desastroso viaje a tocar en la 5º MMI de Valdivia

5 Dec

El fin de semana recién pasado viajamos a Valdivia con Fakuta & The Laura Palmers a tocar en el 5º MMI (Muestra de Música Independiente). Este era el 5º año que lo realizaban y habían muy buenas referencias de los años anteriores porque siempre ganaban el Fondart y había muchos recursos para el festival (que duraba 2 días y llevaba a muchas bandas). El asunto es que este año no ganaron el Fondart y en una jugada que aún no logro entender, alargaron a 4 días el festival y llevaron muchas más bandas. El trato era ir con viaje, traslados, alojamiento y comida pagados, pero no nos iban a pagar nada extra. Como nos gusta tocar y viajar siempre es chori, aceptamos. Sabíamos que salíamos el viernes cerca de las 22:00 Hrs hacia Valdivia, pero a última hora se adelantó el viaje, saliendo a las 8:30 pm, desarreglando todo lo que tenía planeado para esa tarde. Llegamos al terminal y nos subimos a un bus muy pequeño, salón clásico, con el baño con la luz mala. Filo, ibamos felices todos. Dormimos pésimo pero llegamos a las 7:30 am a Valdivia. Buscamos al productor que nos iba a estar esperando (Mario Carrasco) y no estaba. Lo llamamos y no atendía. Atendió más tarde diciendo que no iba a poder ir a buscarnos pero que fueramos a la hostal. Llegamos a la hostal Bosque Nativo y no había ninguna habitación vacía, toing. Esperamos a que se desocupara una, dejamos nuestras cosas y fuimos a recorrer la ciudad. Fuimos a la Universidad Austral y al Jardín Botánico, llovía heavy metal pero paraba a ratos. Avanzaba el paseo y nos dimos cuenta que nadie nos llamaba para que fueramos a probar sonido. Llamamos a Mario Carrasco y dijo “Ahh, bueno, vengan a probar si quieren”. Fuimos y estaba probando Tío Lucho, que tocaba después que nosotras. Probaron mil horas y después nosotras, todo bien. Fuimos a la hostal a tomar una merecida siesta y estuvo difícil porque los Tío Lucho, que se alojaban en la misma hostal en la pieza del frente, se pusieron a tomar whisky de forma impactante, gritando por los pasillos en la onda fraternidad. Algo que no había visto ni cuando tenía 12 años y hacía fiestas en mi casa sin mis papás. En fin, llegó la noche, la hora de tocar y llegamos a los camarines. Habían 2, uno muy pequeño que estaba repleto de gente, y uno muy grande donde estaban los Tío Lucho y estaba todo tirado lejos. Elegimos este último porque había más espacio. Empezamos a vestirnos cuando los Tío Lucho empiezan a gritar desaforados como cavernícolas, tirando cosas a las paredes (ropa y la comida del catering) y me colapsé cuando vi al vocalista tirar terrones de azúcar muy fuerte contra las paredes. Tuve que decirles que pararan porfa, que el espacio era compartido. Los Tío Lucho entraban y salían del camarín gritando cosas incomprensibles, agarrándose las cabezas entre ellos y gritando, cual jugador de rugby o algo así, cuando de pronto el guitarrista empieza a hablar cosas sobre su cuerpo, específicamente sobre sus genitales y después procede a escupir pollos gigantes en el piso del camarín. No lo soporté y le grité que respetara el espacio común, me respondió “ANDATE SI NO TE GUSTA GUEONA” y siguió escupiendo y yo gritándole que me iba, que ni loca iba a compartir mi espacio con gente tan imbecil. Nos fuimos al camarín pequeño. El pasillo estaba lleno de escupos. Le dije a Mario Carrasco que por favor controlara a la gente y se disculpó diciendo que se le estaba escapando de las manos. Ya estaba claro eso jj Tocamos frente a 10 personas, creo que al final entraron más y eran 20. El teatro era muy grande. Hubo cero difusión. Nos hizo sonido el sonidista de Bar Loreto, que estaba igual de curado que los Tío Lucho y nos arruinó 2 canciones poniendoles extra delay, tanto que casi nos confundió mientras tocabamos. WTF! Los Tío Lucho seguían tomando y gritando, y venía su turno. No pudieron hacer sonar uno de los teclados y se demoraron mucho, además estaban insultando a los de la producción, así que los cortaron. Subieron al escenario e insultaron al público diciendoles “provincianos culiaos”, pidiendo que les sacaran fotos porque eran de Santiago. UF! Se querían agarrar a combos con los de la producción, nosotros nos fuimos mejor. Fuimos a un clandestino a comer pizzas y tomar cerveza y nos encontramos con gente que estaba ahí viendo el espectáculo. Los Tío Lucho siguieron pasteleándose, algo que no se puede ni creer. Fuimos a dormir tipo 3 am, y la tropa de tarados llegó a las 6 o algo, gritando (obvio) y dando patadas. Horrible.
Al día siguiente necesitábamos nuestros pasajes de vuelta, cosa que nunca nos pasaron. El día anterior dijeron que por la poca asistencia del público, estaba difícil que pudieran pagarnos los pasajes de vuelta, cosa que iba en contra de lo acordado. Mario Carrasco tenía su celular apagado. Lo llamamos toda la mañana sin respuesta. Lo prendió cerca del mediodía. Nos juntamos con él en el terminal, donde llegó con uno de los Tío Lucho. Justo antes de encontrarnos con él, compró los pasajes de todos los de Tío Lucho y se le acabó la plata, comprando solo 3 pasajes para nosotros y nosotros eramos 5. Nos preguntó si podíamos prestarle plata para comprar los otros 2 y que nos la devolvía en la semana. Le dije “LOCO, NO TE CONOZCO, COMO NOS PIDES PLATA A NOSOTROS, ENDEUDATE CON TUS PAPÁS O TUS AMIGOS Y COMPRANOS LOS OTROS 2 PASAJES”. Y eso hizo. Qué onda su tino! Le decíamos que cómo hacía eso, que los de Tío Lucho ni siquiera habían tocado y les compró primero los pasajes y decía “no sé qué decir” (DISCULPAS AL MENOS?) Nos fuimos no queriendo saber más de este individuo e intentamos hacer que valiera la pena el viaje. Lo logramos: fuimos a la isla Mancera, al fuerte de Niebla, compramos unos souvenirs y de vuelta pasamos a la Kunstmann. Probamos la nueva cerveza de arándanos, deliciosa. Y me comí un crudo enorme, no sé cómo lo logré. Llegamos al terminal, los pasajes eran de GAMA BUS, bus más chico que el bus en el que nos fuimos, y en el camino se subieron 20 personas con cajas que apilaron en el pasillo. No se podía pasar. Llegamos media hora tarde a Santiago, todos teníamos cosas que hacer y tuvimos que andar corriendo.

EN FIN!!

LECCIONES:

– Mario Carrasco es lo peor en producción de eventos, ojalá nunca más lo vea ni escuche su nombre.
– Bandas que quieran ir al MMI en Valdivia: NO LO HAGAN! (o averiguen muy bien las condiciones exactas antes de viajar)
– Tío Lucho es la banda de personas más patéticas wannabe rockstars que he visto en toda mi vida. Ni los Washiturros deben ser tan flaites.
– Viajar con amigos bacanes puede arreglar hasta el peor de los viajes ❤